Hola, parece que nociones tiene, habla de calderín, habla de recoger el gas, habla de presostatos, en fin, desde luego sabe más que mi mujer de esto, pero coincido en que eso de puentear el presostato de alta con el de baja... Tú piensa que yo soy estudiante, acabo en 6 meses, me dan el rite, la habilitación de frigorista, lo de gases fluorados... Sé mucho de teoría y relativamente poco de práctica, me gusta esto, pero si has estudiado bien la teoría como yo, la básica al menos, no hablas como el compañero. Coincido con los demás en que parece que no entiende lo más rudimentario y básico del oficio: el papel de los presostatos, por ejemplo, su función. Mucho cuidado con todas estas cosas, que no son juguetes. A mí me enseñan a tener el respeto necesario a las instalaciones: si tenemos un tanque de nitrógeno a 300 bares (tenemos uno a 300, no a 200, aunque es el primero que veo), lo que decía, si tenemos un tanque a 300 bares, ojo con él, que hablamos de 300 bares, repito, esto no es un juguete, hay que respetar a las instalaciones. Yo cuando me acerco a un circuito a intentar intervenirlo soy más papista que el papa. Una buena base de teoría bien enseñada te hace prudente al máximo: cuidado con la humedad, cuidado con las chapuzas, cuidado con esto, con aquello... y siempre algo se te escapa. Por ejemplo, a mí se me hubiera escapado pensar en que el gas, si es de esos con deslizamiento, no vale con reparar la fuga y recargar, ha evaporado y ha quedado descompensado. Lo sabía, pero se me pasa en el momento de la verdad. Es un oficio complejo y más peligroso de lo que parece. Hay que ser inteligente. Por ejemplo, antes de meter nitrógeno sin manorreductor y volarse un ojo, llamar a un técnico. No hay más. Poco a poco el oficio se pone en su sitio, el mismo que tienen los electricistas. Ese miedo que se le tiene a la electricidad hace falta aquí. El oficio se ha regulado porque es peligroso, señores, daña a las personas y al medio ambiente. Esto no es un juego