Documento editado por REFECOL Refrigerantes Ecológicos - Guayaquil Ecuador
Sic: Diferencia en composición de las fases y Fugas de R407C
Miércoles, Octubre 8, 2008
Una de las principales preocupaciones que tiene todo instalador de este refrigerante, son las fugas del mismo, ya que en determinadas circunstancias puede producirse la rotura o descomposición de la mezcla original. Este hecho es algo que se produce en mayor o menor medida en las llamadas Mezclas No Azeotrópicas, y está relacionado directamente con las diferentes concentraciones que los componentes de la mezcla tienen en fase líquida y en fase vapor. Por ejemplo, si analizamos una botella de refrigerante R407C, vemos que por ejemplo, en la fase líquida la concentración de R32 es de un 23%, mientras que el mismo R32 en la fase vapor de la botella está presente con una concentración del 32%. El R125, en la fase líquida está presente en un 25%, mientras que en la fase vapor en un 32%. El R134a, que de los tres gases de la mezcla es el de menos presión, en la fase líquida está presente en un 52%, mientras que en la fase vapor solo en un 36%. De este análisis que acabamos de hacer podemos sacar una conclusión importante: existe una diferencia apreciable entre ambas fases, en lo que hace referencia a la composición de los refrigerantes que componen la mezcla; esto implica que siempre que debamos efectuar cargas de R407C habrán de ser por fase líquida.
En lo que hace referencia a las fugas y descomposición de la mezcla, podemos decir lo siguiente: si la fuga de refrigerante ocurre en una porción del sistema donde solo está presente el vapor (línea de descarga del compresor o de succión), la composición del refrigerante no cambia, debido a que la composición del vapor es idéntica a la de la mezcla, y cada componente fuga en la misma proporción. Si la fuga de refrigerante ocurre donde solo el líquido está presente, la composición del refrigerante no cambiará debido a que la proporción del líquido es la misma a la de la mezcla y fugará en las mismas proporciones. Si la fuga se produce en una parte del sistema donde coexisten las fases líquida y vapor simultáneamente (evaporador, condensador o recipiente de líquido), el fraccionamiento podrá producirse y habrá un cambio en la composición del refrigerante. Si por ejemplo, la fuga se produce en el evaporador y solo fuga vapor (fugará preferentemente el de mayor presión de vapor) habrá una variación en los porcentajes de composición de la mezcla resultante. Sin embargo, en la mayoría de sistemas donde coexisten las fases líquido y vapor y se produce una fuga, normalmente fuga tanto gas como líquido minimizando de esta forma la fuga de la fase gas. Es importante tener en cuenta que para que exista un cambio en la composición del refrigerante de un sistema, la fuga debe producirse en una parte del sistema donde estén presentes la fase líquido y vapor y solamente el vapor se fuge del sistema. Estas situaciones no se producen cuando hablamos de refrigerantes puros o de mezclas azeotrópicas.
Manómetros y mangueras: Los manómetros de R22 no se pueden utilizar con este refrigerante. Para ello hay puentes de manómetros con relojes para R407C, y que a veces incluyen las escalas de presión/temperatura de otros refrigerantes compatibles con aceite polioléster como R404A o R134a. Si se utilizan puentes de manómetros de R22, siempre puede arrastrar alguna gota de aceite mineral e introducirla dentro del equipo de R407C, por esta razón se desaconsejan.
Báscula electrónica: Los equipos de aire acondicionado que funcionan con este refrigerante debido a que trabajan con capilares y elementos muy sensibles necesitan trabajar siempre con la carga exacta de refrigerante, por eso es recomendable cargar siempre el R407C con una báscula electrónica. Además si las cargas son pequeñas, el cilindro dosificador es siempre menos exacto que una báscula electrónica.
Bomba de vacío: No hay que olvidar que trabajamos con aceites POE, altamente higroscópicos, equipos muy sensibles y refrigerantes que pueden dañarse en presencia de humedad; por ello el realizar buenos vacíos en los equipos, es algo fundamental. El problema de las bombas de vacío es que al trabajar con aceite mineral y producirse un corte de corriente por ejemplo, se producirá un retorno del aceite mineral de la bomba hacia la instalación: por esta razón es necesario trabajar con bombas de vacío que dispongan de válvulas antiretorno que eviten este problema. Además, siempre es recomendable trabajar con bombas de doble etapa, porque sus prestaciones son muy superiores a las de simple efecto.
Detectores de fugas: han de utilizarse detectores electrónicos o lámparas ultravioletas para HFC. Los detectores de llama no se pueden utilizar porque solo detectan cloro, y el R407C es un compuesto no clorado.
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